PERILL

La vivienda, situada en la planta baja de un edificio del 1900 del barrio de Gracia, es de planta rectangular alargada con al fondo un patio-jardín con un precioso árbol de naranjo. Al final de la parcela, un anexo, con una terraza accesible, completa la propiedad.

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El proyecto nace de las necesidades de una familia con dos niños y toma como punto de partida potenciar el patio/ jardín, desdibujando el limite interior – exterior, y aprovechar al máximo la luz natural de la fachada posterior.

La nueva distribución propone de liberar la galería que da al patio, dividida por la presencia de la antigua cocina, para convertirla en un espacio filtro entre el jardín y la vivienda, donde trabajar y jugar. Se amplían los pasos en la pared de carga que la conectan al dormitorio de los niños y al salón comedor, para proporcionar más luz al interior de la vivienda; se modifica la fachada para trasformar una de las ventanas en una puerta doble y se substituyen todas las carpinterías, abriéndolas hacía fuera para enfatizar la conexión con el jardín.

Se dibuja el espacio de salón/comedor/cocina como un ambiente diáfano, caracterizado longitudinalmente por un mueble contenedor dibujado a medida, que marca desde la entrada la zona de estar y sucesivamente la de cocina/comedor.

Las puertas interiores se reducen al mínimo y son todas correderas para enfatizar la fluidez del espacio.

El anexo se convierte en una habitación flexible con baño propio, pensada para invitados o para habitación de uno de los niños cuando crezcan, y trasformado en despacho para el teletrabajo durante el Covid.

Se utiliza un suelo en lamas de madera de roble en todas las estancias para dar más continuidad al espacio, menos en los baños donde se emplean baldosas cerámicas de distintos colores. Todas las paredes y techos son blancos para proporcionar mayor luminosidad. El contraste lo marcan los muebles a medida, mediante el utilizo de una paleta de colores que va del gris antracita, al verde y azul intensos.

El patio se divide en zona de estar al aire libre marcada por una tarima de teka y otra de juego con un suelo de caucho rojo teja con un círculo azul alrededor del árbol.

El mobiliario escogido por los clientes se completa con algunas piezas de hierro y madera realizadas por Amato Sole en su estudio/taller situado en la misma calle Perill.

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